Historia ejemplar
Había una vez un albañil, muy humilde, que se encontró a un niño de aproximadamente 8 años, este niño se encontraba atrapado en arenas movedizas; este hombre, desesperado al ver al niño, hizo todo lo posible por sacarlo. Finalmente después de muchos intentos lo logro salvar.
Después de un tiempo, un hombre, con joyas en los dedos y adinerado, lo fue a visitar; dijo: vengo a agradecerte, por la vida de mi hijo ¿Qué quieres que te de?
el albañil le dijo: No deseo nada, yo no cobro por los favores que ago.
Pero apareció el hijo pequeño del albañil
El hombre adinerado le dijo entonces: ¿Es tu hijo?
Sí- respondió el albañil; entonces te propongo algo; cómo tu hijo es aproximadamente de la edad de mi hijo, que estudien juntos- dijo el adinerado al humilde hombre; y acepto.
Con el tiempo, el hijo del hombre adinerado se convirtió en un importante abogado y el hijo del hombre humilde en el mejor medico llamado Alexander Fleming, que había descubierto la penicilina.
Pero un día el abogado se enfermo gravemente y lo llevaron al hospital, y casualmente el doctor que lo atendió y le salvo la vida fue aquel niño humilde con el que había estudiado de niño. El padre del abogado se dio cuenta que lo que alguna vez se hace luego se devuelve.
Valores encontrados en la lectura:
- Humildad
- Gratitud
- Amabilidad
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